La relojería suiza ofrece una excelencia que sólo se aprecia cuando se posee un reloj de estas características. Una manufactura sin igual, precisión experta, siglos de experiencia y un diseño impecable son elementos fundamentales para ser considerado un icono de la relojería suiza, algo que Rolex, Patek Philippe, Audemars Piquet y Omega han perfeccionado con el paso del tiempo.
Cada una de estas marcas se ha convertido en un icono de la industria relojera, veneradas por su fusión de tecnología innovadora y prestaciones exclusivas. Pero, ¿cómo dejaron su impronta y cuál es su importancia hoy en día? Nuestro experto en alta relojería, João De Brito E Faro, nos explica en qué se diferencian estas marcas y cómo sus detalles más célebres han llegado a adornar las muñecas de una impresionante lista de personalidades, desde el primer hombre en llegar a la luna hasta presidentes históricos.
«Los suizos y la relojería han ido de la mano desde sus inicios», afirma De Brito E Faro. «Su ética colectiva, "todos para uno, uno para todos", ha ayudado a dar forma a la industria, ya que entienden que para seguir desafiándose a sí mismos, necesitan expertos en cada componente del reloj. Fomentaron el concepto de ensamblaje, según el cual las distintas piezas del reloj se obtienen de fabricantes especializados y el producto final se ensambla en la propia empresa. Esto generó puestos de trabajo, desarrollo tecnológico y, sobre todo, fortaleció su industria y su posicionamiento como líderes mundiales de la relojería».
A continuación conocerás mejor la historia y los modelos clave de estos relojeros suizos de fama mundial.
Rolex
Sería imposible hablar de relojes suizos sin destacar Rolex. Fundada en 1905, la emblemática marca se convirtió en pionera en el mundo de la relojería cuando inventó las cajas sumergibles. Con una corona atornillada y un fondo patentados, nació la emblemática caja Rolex Oyster. Desde entonces, ha seguido desarrollando una tecnología inédita. Es una marca muy apreciada por coleccionistas y famosos, desde diseñadores a raperos, pasando por Victoria Beckham y Drake.
«Rolex ostenta la corona de la relojería suiza y su liderazgo ha sido indiscutible. No hay otra marca que haya sido capaz de lograr un posicionamiento tan elevado con una producción tan grande», explica De Brito E Faro. «Está especializada en el desarrollo de relojes de precisión para las condiciones más exigentes, desde el submarinismo hasta el automovilismo, y los modelos emblemáticos de Rolex se han convertido en símbolos de estatus en toda la sociedad. Aunque la mayoría de los modelos se desarrollaron originalmente para aplicaciones profesionales específicas, ahora forman parte de las colecciones de la gran mayoría de los entusiastas de la relojería».
Patek Philippe
Con casi dos siglos de historia, Patek Philippe es un auténtico precursor de la relojería moderna. La marca siempre ha sido una potencia impulsora de las innovaciones tecnológicas, como la producción del primer reloj de bolsillo con tourbillon en 1863, que contrarrestaba la fuerza de la gravedad en el movimiento para mantener la hora exacta. La casa también es venerada por su exclusividad. Desde 1839, se estima que se han fabricado menos de un millón de relojes en todo el mundo, lo que convierte a un diseño de Patek Philippe en una pieza realmente especial.
«Patek Philippe siempre ha estado en la cúspide por su calidad, pero también por su capacidad de inversión», señala De Brito E Faro. La propia casa acuñó en su día el famoso eslogan: «Nunca un Patek Philippe es del todo suyo. Suyo es el placer de custodiarlo hasta la siguiente generación». La marca es conocida por sus complicados mecanismos, como cronógrafos de fracciones de segundo, calendarios perpetuos y cronómetros mundiales, así como por sus relojes deportivos. Jay-Z ha lucido el reloj más sofisticado jamás desarrollado por la marca, el Grandmaster Chime, y piezas de la década de los 70, como el Nautilus 3800.
Audemars Piguet
Amigos de la infancia y cofundadores, Jules Louis Audemars y Edward Auguste Piguet iniciaron su camino en la relojería suiza en 1875. Poco después hicieron historia cuando crearon el primer reloj de pulsera con repetición de minutos en 1892, antes de diseñar y lanzar el primer reloj de bolsillo, Grand Complication, con repetición de minutos, alarma, calendario perpetuo, segundero muerto, cronógrafo y ratrapante, en 1899. Este desarrollo pionero continuó en la década de 1900, cuando la marca lanzó el reloj de pulsera más fino del mundo.
En la actualidad, De Brito E Faro considera que Audemars Piguet es una de las marcas más importantes del mundo de la relojería suiza: «Audemars Piguet es otra de las grandes marcas que siguen formando parte de la tradicional santísima trinidad de la relojería. Conocida por sus complejos calendarios perpetuos, es una marca venerada por su popular diseño Royal Oak, creado por Gérald Genta. Otros modelos dignos de mención son el elegante diseño Jules Audemars, la exclusiva colección Millenary, los modelos Concept, el Code 11.59 y el Royal Oak Offshore», afirma.
Omega
Ostentando los títulos del primer reloj de pulsera en la luna, llevado por Buzz Aldrin, y cronometrador oficial de los Juegos Olímpicos, la importancia cultural de Omega es innegable. La artesanía suiza y la precisión están en el núcleo de la reputación de la marca, con una impresionante lista de celebridades, películas y momentos históricos que optan por lucir los bellos relojes de la firma. Esta fama es el resultado de su gran atención al detalle, sus innovaciones tecnológicas y su intemporalidad inigualable en lo que se refiere a la estética.
Aquí, De Brito E Faro comparte algunos de los productos más destacados de la marca: «Omega completa esta lista de los principales protagonistas de la industria relojera suiza. Con modelos impresionantes como el Speedmaster Professional y el robusto Seamaster, la marca ofrece opciones legendarias para todos los coleccionistas, rivalizando incluso con Rolex. Popularizada por las películas de «James Bond», George Clooney y Nicole Kidman, Omega ha colaborado recientemente con Swatch para crear el MoonSwatch, atrayendo aún más atención en torno a esta marca icónica».