Los relojes de lujo siempre han sido un artículo codiciado, pero un repunte posterior a la pandemia (acentuado por un entusiasmo desenfrenado) los ha convertido en una necesidad, más que un objeto de deseo. Un dato especialmente interesante de la creciente popularidad de los relojes es la cantidad de mujeres que se están introduciendo en este mundo. Gracias en parte a las redes sociales, la obsesión por su coleccionismo, antes reservada en gran medida a los hombres, ha entrado en la psique femenina. Por suerte para las mujeres, hay una gran variedad de estilos entre los que elegir, y como hasta hace poco eran los relojes masculinos los que acaparaban la mayor parte de la atención, los modelos de alta relojería femenina han pasado desapercibidos y sin recibir mucha atención mediática.
Pero con tanta variedad, ¿cómo elegir? No te preocupes: hemos elaborado una breve guía de los mejores relojes femeninos de cinco de los fabricantes más emblemáticos. Se trata de la crème de la crème, apta para cualquier coleccionista, perfecta tanto si quieres hacer tu primera compra de un reloj de lujo como si ya conoces mucho la industria.
Reloj Nautilus de Patek Philippe
Patek Philippe acuñó en su día el famoso eslogan: «Nunca un Patek Philippe es del todo suyo. Suyo es el placer de custodiarlo hasta la siguiente generación». Estos relojes no están pensados para su compraventa (aunque alcanzan precios enormes en el mercado secundario, lo que los convierte en piezas de inversión seguras); son relojes diseñados para ser cuidados y transmitidos de generación en generación. Si se trata de una reliquia, ¿por qué no elegir el modelo más deseado de la marca? Es decir, el Nautilus.
Presentado por primera vez en los 70, el Nautilus fue diseñado nada menos que por Gérald Genta, el famoso relojero también responsable del Royal Oak de Audemars Piguet. A pesar de las críticas dispares que recibió tras su lanzamiento, el Nautilus ha evolucionado con el tiempo hasta convertirse en un «reloj de moda». Gracias, en parte, al modelo 5711 Nautilus en colaboración con Tiffany & Co. que alcanzó más de 6,5 millones de dólares en una subasta en 2021. Sin embargo, a diferencia de los anteriores, los modelos femeninos siguen siendo un tesoro infravalorado. El tamaño más pequeño de este diseño de 26 mm equilibra la contundencia del modelo, mientras que el oro amarillo combina a la perfección con la esfera negra, dando un toque especial al tono suave del metal. Algunos relojes lo tienen todo.
Reloj Happy Hearts de Chopard
Si no conoces muy bien el mundo de la relojería (con mayúsculas), puede que pienses que Chopard es ante todo una marca de joyas, y no te faltará razón. La firma es famosa tanto por su «alta joyería» como por su «alta relojería». Desde su fundación en 1860, Chopard sigue siendo una empresa familiar, lo que permite que el lujo de la independencia alimente sus alegres creaciones. El reloj Happy Hearts y toda la gama Happy Sport y Happy Diamonds son ejemplo de ello. Estos relojes son imaginativos y emocionantes, al tiempo que se mantienen fieles a los altos estándares de artesanía de la maison. En pocas palabras, el reloj Happy Hearts demuestra que las piezas verdaderamente lujosas no tienen por qué ser tan serias. Chopard hace gala de este principio con este modelo, definido por sus diamantes flotantes en forma de corazón que bailan sobre la muñeca. Esta es tu invitación a vivir, reír y amar la vida.
Reloj Royal Oak de Audemars Piguet
El Royal Oak de Audemars Piguet es uno de los relojes más famosos del mercado, sinónimo del espíritu ferozmente pionero que definió su lanzamiento en la década de los 70. El Royal Oak celebra su 50 aniversario este año y la casa ha lanzado varios modelos de edición limitada para honrar el hito. Tras haber adornado las muñecas de todo el mundo, desde Jay-Z hasta Mark Ronson y Serena Williams (todos ellos colaboradores de la marca), este modelo es conocido como la elección de los famosos.
Los bordes artísticamente rígidos del Royal Oak se feminizan en esta versión de 25 mm, acentuada con marcadores de diamante. Es una elección maravillosa si no quieres ser el centro de atención y prefieres la sutileza y elegancia. El Royal Oak es muy reconocible, por supuesto, pero el TTRO (llamado cariñosamente «Teeny Tiny Royal Oak») es más una pieza para los entendidos. No temas explorar la versión Offshore: esta atrevida edición del Royal Oak evoca las tendencias audaces del 2000 como solo Audemars Piguet sabe.
Reloj Datejust de Rolex
Rolex es un fabricante de relojes que no necesita presentación, es conocido por todos. De hecho, el nombre Rolex se eligió originalmente para trascender el idioma y la cultura; una palabra que todo el mundo puede pronunciar sin dudar, a diferencia de, por ejemplo, Audemars Piguet. A pesar de este atractivo para todos los públicos, Rolex ha mantenido su estatus aspiracional y exclusivo, aliándose con los mejores talentos y eventos deportivos. Si has asistido a un partido de tenis profesional o a una carrera de Fórmula 1, lo entenderás: su característico tono verde oscuro lo envuelve todo.
El Datejust es el modelo más vendido de la emblemática marca. El «Date» del nombre se debe a su ventanilla de fecha que cambia automáticamente, una tecnología innovadora cuando se lanzó por primera vez en 1945. Hoy en día, sigue siendo uno de los relojes más útiles del mercado. El Datejust destaca realmente por su versatilidad: combina prácticamente con todo y, gracias a su famoso brazalete Jubilee de eslabones múltiples, este reloj es capaz de acompañar cualquier estilismo deportivo sin esfuerzo. Elige entre el modelo dorado, bicolor o totalmente de acero, como este, y lo mejor es que nunca te equivocarás.
Reloj Constellation de Omega
¿Sabías que el reloj Constellation fue diseñado por una mujer? Carol Didisheim creó la innovadora reedición de 1982 con apenas 26 años, y desde entonces se ha convertido en uno de los diseños más notables de la marca. Puede que te cuestiones el por qué de la mención del género de su creadora, pero te sorprendería saber el reducido número de mujeres que hay detrás del proceso de diseño de un reloj; por no hablar de la escasa presencia femenina en las reuniones de los consejos ejecutivos de la industria. Popularizado por Cindy Crawford y el icono de los 2000, Anna Kournikova, el Constellation es un ejemplo del legado duradero del buen diseño. Su brazalete integrado, sus características «garras» que se enganchan a un bisel muy original y sus posibilidades de personalización son solo algunas de las muchas razones por las que este reloj ha mantenido su relevancia desde su creación. Personalmente, prefiero los Constellation pequeños, como este diseño de caja de 25 mm. Es pequeño sin resultar excesivamente delicado: gran potencia en un tamaño reducido.